By Staff
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, aseguró este miércoles que hará evaluaciones para determinar el daño psicológico a padres migrantes que fueron separados de sus hijos por políticas de su antecesor, Donald Trump.
En una demanda presentada por migrantes, piden compensación del gobierno luego que miles de niños fueron separados de sus padres en una política calificada de inhumana por líderes políticos y religiosos en todo el mundo. Las negociaciones para un arreglo entre abogados de los demandantes y el gobierno se suspendieron el año pasado.
Los abogados del Departamento de Justicia se han reservado el derecho de examinar a los niños que fueron separados, si es necesario. Las evaluaciones son algo de rutina en demandas por abuso emocional, pero estos casos son inusuales porque el papel del gobierno en el trauma de padres e hijos causado por las separaciones ha sido bien documentado.
“El presidente Biden llamó las separaciones familiares por Trump criminales y una mancha moral para la nación, pero ahora el gobierno está contratando a doctores para tratar de decir que las familias no sufrieron tanto”, dijo Lee Gelernt, vicedirector del Proyecto de Derechos de los Inmigrantes para la Unión Americana de Libertades Civiles (ACLU) y abogado de los demandantes en el esfuerzo para compensar a los migrantes.
Según los abogados del gobierno, los migrantes “afirman que sus lesiones mentales y emocionales son de naturaleza persistente y permanente” y que están directamente relacionadas con la política del gobierno. Dicen que es necesario que el gobierno tenga su propia oportunidad para examinarlos.
Los pedidos se produjeron en dos causas presentadas por 11 familias. Hay casi dos decenas de causas similares pendientes en otras cortes y algunas se han sometido ya a las evaluaciones psiquiátricas pedidas por el gobierno.
Pero los padres han ofrecido ya horas de declaraciones en las que narraron detalladamente lo ocurrido. Investigadores del gobierno han dicho que los niños separados de sus padres mostraron más miedo, sentimientos de abandono y síntomas de estrés postraumático que los niños que no fueron separados.
Algunos niños creían que sus padres los habían abandonado o que los habían matado. Para algunos, el trauma mental causó síntomas físicos, como dolores en el pecho o el corazón, de acuerdo con un reporte del 2019 por la oficina del inspector general en el Departamento de Salud.
Los padres estudiados por Physicians for Human Rights, una organización sin fines de lucro de médicos que trabajan para documentar violaciones de derechos humanos, exhibieron pensamientos suicidas y sufrieron una serie de problemas, incluyendo pesadillas, depresión, ansiedad, pánico, preocupaciones y dificultades para dormir.
Funcionarios del gobierno de Biden han lamentado las políticas de la era de Trump. El demócrata Biden dijo en su campaña que esas políticas eran “un escándalo, un fallo moral y una mancha en nuestro carácter nacional”.