By Staff

El eje de inclinación de la Tierra se ha movido casi un metro en algunos años, es un hecho confirmado por científicos de la NASA, pero, ¿cuáles son las consecuencias?

En las últimas décadas, nuestro planeta ha estado experimentando un cambio imperceptible pero significativo: el eje central de la Tierra se ha inclinado casi un metro, según un estudio de la NASA. Este «leve desbalance» ha generado inquietud en la comunidad científica, y no es para menos, ya que sus repercusiones podrían ser profundas y afectar diversos aspectos de nuestra vida cotidiana.

Expertos han calculado que esta inclinación en el eje de la Tierra de aproximadamente 80 centímetros desde 1993 se debe, en gran parte, al exceso de extracción de agua subterránea. La humanidad ha extraído alrededor de 2150 gigatoneladas de este recurso esencial. Un dato alarmante que pone en perspectiva la urgencia de abordar esta situación.

Además, la inclinación del eje de la Tierra puede desencadenar fenómenos climáticos extremos, como sequías, inundaciones y lluvias intensas podrían volverse más frecuentes y devastadoras. Además, la variación en la inclinación afecta la exposición de diferentes regiones a la radiación solar directa a lo largo del año, lo que influye en los patrones de cultivo y en la salud de nuestra piel.

Un estudio realizado por la Universidad de Zúrich revela otro dato preocupante: más de 9,6 billones de toneladas de hielo glaciar se han derretido desde 1961 hasta 2023, provocando un aumento del nivel del mar de 27 milímetros. Este fenómeno es un recordatorio contundente de que el cambio en el eje de la Tierra no es un problema aislado, sino una parte integral de un conjunto de desafíos medioambientales que de manera urgente.

Por qué se movió el eje de la Tierra y cuáles son sus consecuencias

Estudio señala que el desplazamiento de masas y el aumento del nivel del mar son causados por la extracción de aguas subterráneas.

Se relaciona este fenómeno con el antropoceno, la era geológica caracterizada por la actividad humana.

El polo de rotación de la Tierra cambia debido a la redistribución de aguas subterráneas, influyendo en la masa terrestre.

Con información Juan Chaidez

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