Categoría: Deportes

Jorge “Maromero” Páez, el campeón del mundo que nació en un circo. El mexicano está entre los 10 máximos noqueadores de la historia de su país, sin embargo es recordado por su estilo extraño, por sus saltos y por sus particulares cortes de pelo y atuendos. Una vez subió vestido de novia al ring. En otras palabras, llevó la alegría al ring. De niño le tocó trabajar en un circo junto a su madre y a su abuela. Hacia piruetas y tarea de seguridad. Entonces, su tío empezó a entrenarlo como boxeador. Y allí empezó nomás. Según confesó, su sueño era comprarle un circo a su abuela con la plata que podía ganar a las trompadas. En su carrera, tuvo un récord de 79 triunfos, 14 caídas y 5 empates. Su noche histórica fue cuando se coronó campeón pluma en 1988: le quitó el invicto al estadounidense Groove que llegaba con un récord de 34 triunfos sin caídas ni empates. Maromero iba abajo en las tarjetas de los 3 jueces, pero en el último asalto lo derribó 3 veces y se alzó con el título por puntos. Luego ganaría la revancha por nocaut en el undécimo. Defendio 8 veces la corona. Subió de peso y fue noqueado por De la Hoya. Desde que se retiró, se abocó de lleno a la religión. Hace años Juan Manuel Márquez le preguntó porqué no daba notas. Y Paez respondió: “no quiero ser ídolo para nadie, porque a Dios no le gusta nada de eso”.

Adrio Michelena